Avanzan las obras del túnel

Esta noticia es de hace unos días, de El Ideal Gallego, hablando sobre las obras que se están llevando en la carretera de acceso a Pocomaco (donde por cierto se siguen produciendo accidentes, sin que parezca que esto tenga remedio por el momento).


La colocación de los grandes bloques de hormigón que ser servirán de estructura al túnel que enlazará Pocomaco con Matogrande ha servido para dar un impulso al proyecto, que facilitará el acceso al polígono residencial de Someso. El enorme tamaño de las piezas prefabricadas obliga a que los obreros reciban la ayuda de dos grandes grúas y de otra maquinaria pesada para ensamblarlas.

A cielo abierto y a pleno sol. No todos los días puede uno contemplar un túnel subterráneo iluminado por la luz del día, pero en el polígono de Someso concretamente sí que es posible.
Esta semana, los operarios de la constructora Teconsa han colocado los imponentes bloques de hormigón de la estructura del túnel que unirá el polígono con la carretera que enlaza en la actualidad Matogrande con el parque industrial de Pocomaco.
El viernes pasado finalizó la excavación del trazado inicial del subterráneo, sinuosa trinchera que ya está recibiendo las gigantescas placas que constituyen el armazón de la infraestructura viaria, y cuya envergadura obliga al manejo de diversos vehículos de maquinaria pesada y también de la precisión más absoluta. No al milímetro, pero sí procurar que las piezas del puzzle encajen.
El futuro
El vial subterráneo servirá de enlace entre la ciudad y el futuro centro comercial de Someso. Una superficie bautizada como Espacio Coruña y que está diseñada para convertirse en uno de los grandes atractivos del nuevo barrio coruñés.
Será un complejo que se levantará en una parcela de 22.000 metros cuadrados y que tendrá una edificabilidad de 50.000, con un espacio hábil alquilable superior a los 40.000 metros. El túnel resultará fundamental para soportar un tráfico previsto en más de dos mil vehículos, una cifra marcada por el número de plazas del aparcamiento subterráneo del complejo.
El desvío
Por lo pronto, las obras no han supuesto mayor molestia a los coruñeses que el verse obligados a dar un par de curvas más para llegar desde Pocomaco a Matogrande.
Y es que la excavación hizo preciso el corte del trazado original de la carretera y establecer un pequeño carril a modo de desvío provisional, que desde hace aproximadamente un mes está garantizando la circulación por el lugar.